Los leperos y el serrucho
Una lepera en el avión
Una lepera toma el avión a Nueva York con un pasaje en clase
económica.
Cuando sube al avión busca su asiento y se encuentra con los asientos
de primera clase.
Viendo que estos son mucho más grandes y confortables, decide
sentarse en el asiento que tiene su número
La azafata revisa su billete y le dice a la chica que su asiento es de
clase económica.
La lepera responde:
– Soy joven, lepera y bonita, y voy a sentarme aquí hasta llegar a
Nueva York, y a mi nadie me mueve.
Frustrada, la azafata va a la cabina y le informa al Capitán del
problema con la pasajera.
El Capitán envía al Copiloto a hablar con la lepera y le confirma que
su asiento es de clase económica.
La Chica responde:
– Soy joven, lepera y bonita, y voy a sentarme aquí hasta llegar a
Nueva York y que no se diga nada más.
El Copiloto no quiere causar problemas por lo que se retira a la
cabina para comentarle el problema al Capitán.
El Capitán dice que su novia también es lepera y que el puede hacerse
cargo del problema.
Así que va a ver a la muchacha, le susurra algo al oído.
Ella inmediatamente se levanta y dice:
– Muchísimas gracias -… abraza al Capitán y se va a sentar a su
asiento de clase económica.
El Copiloto y la Azafata , quienes estaban observando alucinados la
escena, corren a preguntarle al Capitán que le había dicho a la lepera
para convencerla.
El Capitán les dice: – ¡Le dije que esos asientos no van a Nueva York!
(Gracias Trini)
Limpiaparabrisas en lepe
De lepe
El concurso
Un lepero se presenta a un concurso de TV, y va superando todas las pruebas que le ponen.
Al llegar a la penúltima, le pregunta el locutor:
–«Rafael, enhorabuena. Tiene vd. acumulados 500.000 ¤. Ahora nos queda, si vd. quiere, la pregunta final para llegar a ganar 1 millón de ¤… seguimos adelante? «
Contesta el lepero:
–«Claro que si pisha, namás fartaria… pa que sentere toa Ehpaña que en Lepe no somo tan paletos como disen «
Se oye un aplauso atronador, y el lepero saca el sobre, y lo lee el locutor:
– «Vamos a ver, Rafael… de los siguientes 4 pájaros…¿cuál no tiene su propio nido?»
1- GORRIÓN
2- JILGUERO
3- PALOMA
4- CUCO
El lepero se queda pensativo, y como no habia usado ningun comodin, le pide al locutor que le deje hacer una llamada por tlf. Se lo permite, y llama al maestro de Lepe, que es un hombre intelectual.
–«Don Manué, don Manué… soy Rafaé, que etoy en la tele, y er cornúo der locutó ma hesho una pregunta de dos pare de cohone…»
-«Si, Rafaé, ya testoy viendo… tu contesta er cuco, créeme…. er cuco !!»
–«Don Manué, por su padre, está usté seguro que é er cuco?»
–«Que si, Rafaé, que é er cuco»
–«Grasia, Don Manué, usté si que vale»
Total, que gana el lepero el millon de euros, y al volver a Lepe, lo primero que hace en agradecimiento, es llevarse al maestro de copeo. Una vez alli, le pregunta:
–«Don Manué…¿como estaba usté tan seguro que era er cuco?
–«Mu fásil, hombre…. TOR MUNDO SABE QUE VIVE EN UN RELÓ !!! «
(Gracias Trini)
Leperos en América
El Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica oye tanto hablar de los leperos, que decide invitar a un grupo de leperos a que visiten Estados Unidos.
Manda su propio avión a recogerlos y preparan un gran recibimiento en el hangar presidencial, en donde colocan un gran foro, con banda, alfombra y pancartas dándole la bienvenida a los leperos.
Al llegar el avión, la banda empieza a tocar, los coros a cantar y nada, que no bajan los leperos.
El presidente, descontrolado porque no bajan, manda a su secretario a investigar.
Va el secretario y regresa con el presidente y le dice: «Señor, los leperos no quieren bajar porque tienen miedo de Well»
El presidente no entiende nada y le dice: «y quien es Well?»
Regresa el secretario y le dice al lepero: «Pregunta el Presidente qué quien es Well?»
Y el lepero le dice:
«Pues no se, pero allí, en esa pancarta dice:
» WELL COME LEPEROS «.
Pintor de brocha gorda
Un LEPERO llega a una casa y pregunta al dueño si tiene algo para arreglar o reparar, ya que necesita dinero.
El hombre le dice :
– “¿Cuanto me cobras por pintar el porche?”
El lepero responde:
– “¿Que le parecen 100 euros?”
El tipo, muy de acuerdo con el precio, le da la pintura, la escalera, las brochas, etc.
Al rato la esposa del hombre le comenta:
– “¿Sabrá él que tiene que pintar el techo también? ¿Por qué no vas a ver cómo lo está haciendo? Mira que es lepero y hacen muchos chistes sobre ellos.”
El hombre no le presta atención.
Al rato suena el timbre.
Es el lepero que le dice:
– “Terminé con el trabajo y ya limpié las brochas. Como tenía pintura extra le dí dos manos y guardé todo en el garaje.”
El hombre, sorprendido, saca dinero de su bolsillo, paga lo convenido y le agrega 10 euros de propina.
El lepero se lo agradece y al ir retirándose, se da la vuelta y dice:
– ¡Ah! Que sepa que no es un porche… ¡Es un Toyota!”
(Gracias Trini)